CNE – Centro Para Una Nueva Economía – Center for a New Economy
Non-profit, economic research and policy development organization
A veces hay que tomar decisiones dolorosas e indeseables en el presente para evitar un trauma peor en el futuro. Muchos recordamos algún momento cuando éramos niños y no queríamos tomarnos una medicina o que nos suturaran una herida pues pensábamos que era mejor sufrir el dolor permanente al dolor más grande, pero momentáneo, que causaría la cura.
Creo que hablo a nombre de la gran mayoría de los puertorriqueños cuando digo que no me importa de quién sea la culpa de la degradación del crédito de Puerto Rico. Sólo me importa que se resuelva el problema y mejore la clasificación lo antes posible. Es importante reconocer que la degradación viene, en gran parte, no por los problemas fiscales, sino por la percepción de que no hay voluntad seria para enfrentarse a ellos.
Ahora que han pasado 14 años desde que recibí mi bachillerato, me he dado cuenta de una cosa más que ninguna otra: lo poco que sabía a esa edad y lo mucho que pensaba que sabía. Afortunadamente, no tenía los recursos para tomar decisiones que afectaran a grandes grupos pues hoy me sentiría avergonzado y arrepentido de posiblemente haberlos guiado mal.
Recientemente se han lanzado nuevas propuestas orientadas a fomentar la industria de la biotecnología; un sector que se enfoca primordialmente en las ciencias de la vida para, entre otras cosas, desarrollar productos y procesos que mejoren el diagnóstico, tratamiento, y la cura de enfermedades. Esta estrategia es muy acertada ya que Puerto Rico tiene una ventaja comparativa dada su relación con el sector farmacéutico.
Puerto Rico recibe sobre diez mil millones de dólares anualmente en transferencias federales. Estas cubren diversos programas como el Seguro Social, la administración de veteranos, asistencia nutricional y otros.
Mamá siempre nos decía a mí y a mis hermanas que el mejor regalo que le podíamos otorgar era mantener la casa recogida y en orden. Ahora que soy papá de dos preescolares, la entiendo mejor. De hecho, mi esposa y yo nos hemos resignado a no decorar la casa al menos por los próximos cinco años. ¿De qué vale decorar si eventualmente lo van a manchar con crayola?
Dicen que la película de Mel Gibson, “La pasión”, cambió la vida de muchas personas. Se habla hasta de personas que, luego de ver la película y llenos de culpa, se entregaron a la Policía porque habían cometido crímenes y por un tiempo habían logrado burlar a las autoridades.
Lo bueno de los huracanes es que te dan tiempo para prepararte. No se han juntado completamente dos nubes en las cosas de África cuando ya en Puerto Rico estamos comprando salchichas y llenando la bañera de agua. Ya quisieran los que sufren de terremotos y tornados tener una semana para contemplar si hacerle caso o no.
