Living with Risk Daily Briefing – 22 de mayo

Publicado el 22 de mayo de 2020 / Read in English

Centro para una Nueva Economía

Editado por
Sergio M. Marxuach

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Nota del editor

Estimados lectores:

Durante los últimos dos meses, he tenido el privilegio, con la ayuda extraordinaria del equipo diligente de CNE, de brindarles este compendio diariamente. Esperamos que lo hayan encontrado útil e informativo durante estos tiempos difíciles.

Ahora que Puerto Rico y Estados Unidos comienzan a abrir sus economías y levantar ciertas restricciones en un intento cauteloso de restaurar un cierto sentido de normalidad, también evolucionaremos de publicar un compendio informativo diario a uno semanal. La idea es enfocarnos menos en los titulares del día a día y brindar un análisis profundo adicional por el equipo de expertos de CNE, pero aún en un formato altamente legible y accesible.

Además, concentraremos nuestra atención en algunos de los importantes asuntos económicos, sociales y políticos que inevitablemente surgirán en este nuevo mundo donde estamos llamados a coexistir con un virus altamente transmisible, que ha resultado ser letal y sobre el cual todavía no sabemos lo suficiente.

Los invitamos a que nos acompañen en este nuevo emprendimiento, a partir del próximo jueves, 28 de mayo. Hasta entonces, gracias por su apoyo, manténganse saludables y seguros.

Sergio M. Marxuach

Cinco cosas que debes saber hoy

1) El clima del verano podría ayudar, pero no eliminará la pandemia

Estudios recientes respaldan la teoría de que el calor, la humedad y la luz solar del verano podrían retrasar la propagación del virus COVID-19. Según el Washington Post, un nuevo documento de trabajo publicado “por investigadores de la Escuela de Medicina de Harvard, el Instituto de Tecnología de Massachusetts y otras instituciones” encontró que:

  • Las temperaturas promedio por encima de 77 grados están asociadas con una reducción en la transmisión del virus;
  • Cada aumento adicional de temperatura de 1.8 grados por encima de ese nivel se asoció con una reducción adicional del 3.1 por ciento en el número de reproducción del virus, llamado R0;
  • En general, los niveles más altos de humedad relativa fortalecen el efecto negativo de la temperatura por encima de 77 grados;
  • Un milibar de presión adicional aumenta R en aproximadamente 0.8 por ciento (0.6-1%) a la presión media (1016 milibares);
  • También hay efectos positivos significativos para la velocidad del viento, la precipitación y la temperatura diurna en R; y
  • Los “resultados ofrecen evidencia de la relación entre algunas variables climáticas y la propagación de COVID-19, encontrando una asociación negativa entre temperatura, humedad y transmisión”.

Sin embargo, los autores advierten que “los efectos estimados (conservadores) del clima de verano no son lo suficientemente fuertes como para controlar la epidemia estacionalmente en la mayoría de los lugares”. Esta conclusión es respaldada por otro nuevo estudio, de investigadores de la Universidad de Princeton y los Institutos Nacionales de Salud, que “descubrieron que nuestra falta de inmunidad al coronavirus abrumará cualquier influencia atemperante que el clima cálido y húmedo pueda tener en la propagación del virus”.

Parece, entonces, que el clima de verano por sí solo no será suficiente para controlar la propagación del virus. Por lo tanto, las recomendaciones de los CDC son seguir practicando el distanciamiento social y usando mascarillas, incluso al aire libre. Finalmente, es importante recordar que “los factores estacionales en la transmisión del virus también funcionan al revés: una disminución en la transmisión en verano probablemente será seguida por un aumento estacional de las infecciones en el otoño”.

2) El virus se esparce de diferentes formas, complicando los esfuerzos de mitigación

Ed Yong, en The Atlantic, encontró que el virus se está propagando “alrededor de diferentes partes de Estados Unidos de diferentes maneras, haciendo que la crisis sea difícil de predecir, controlar o entender”. La curva de infección nacional cuenta una historia, mientras que la curva de cada estado cuenta una diferente. En Nueva York y Nueva Jersey, la enfermedad está disminuyendo; en Oregon y Carolina del Sur es estable; mientras que en Texas y Carolina del Norte está despegando. Esto es lo que él llama la “pandemia del mosaico”.

Además, “el mosaico no es estático. Los ‘puntos calientes’ del próximo mes no serán los mismos del mes pasado. El coronavirus SARS-CoV-2 ya se está moviendo desde las grandes ciudades costeras donde primero dejó su huella a las zonas rurales que anteriormente habían quedado ilesas”.

El patrón fracturado complica la formulación de políticas públicas porque “las ciudades que pensaban que lo peor había pasado podrían verse afectadas nuevamente. Los estados que escaparon con suerte podrían tener menos suerte”. Además, “el futuro es incierto, [y] los estadounidenses no deberían esperar un regreso rápido a la normalidad ni una experiencia nacional unificada, con una ola de primavera inicial, una pausa de verano y un resurgimiento en otoño”.

En resumen, superar la pandemia será difícil porque muchos factores contribuyen y la enfermedad progresa de manera lenta y desigual.

3) El experimento natural

La tesis de Ed Yong está respaldada por evidencia reunida por el doctor Bruce Weniger y el doctor Chin-Yi Ou, ambos científicos retirados de los CDC. En un artículo fascinante publicado en Medium, argumentan que Estados Unidos está “entrando en lo que los epidemiólogos llaman un experimento natural”.

En este “experimento natural…los estados y los consorcios regionales están determinando el inicio, el ritmo y el grado de sus relajaciones. Luego, los expertos compararán los enfermos y las muertes a continuación, teniendo en cuenta también el alcance que logran en las pruebas, el aislamiento de casos y la cuarentena de contactos”.

La “aproximación ciertamente cruda” de los autores “para observar el efecto de la ‘apertura’ es estratificar por preferencias políticas: rojo, violeta y azul”.

Natural experiment graph
Source/Fuente: Straight Talk from ex-CDC for the Long Slog Ahead

Como se muestra en la gráfica anterior, encuentran que “áreas densamente pobladas, en su mayoría “azules”, fueron afectadas temprano por virus importados y golpeadas con fuerza. Los sistemas de transporte urbano con autobuses y trenes llenos de gente probablemente facilitaron la transmisión. Sin embargo, los toques de queda completos los colocan en las pendientes a la baja de sus curvas. Pero la epidemia continúa propagándose inexorablemente en las zonas rurales, en su mayoría estados “rojos”, con poblaciones más dispersas, diferentes medios de transporte (carros y camionetas) y otras características que pueden ralentizar, pero no eliminar la transmisión”.

Los autores concluyen con una advertencia severa: “las curvas epidémicas estatales y nacionales serán tan volátiles como el mercado de valores reciente. Los gobernadores que “abren” sus estados demasiado pronto o demasiado ampliamente pueden convertirse en flautistas que llevan a algunos constituyentes al río folklórico a ahogarse”.

4) El problema de la escala

Los científicos tienen cada vez más esperanzas de que podrán desarrollar una vacuna eficaz contra el virus SARS-CoV-2 dentro de 12 a 18 meses, lo que es inaudito en este campo. Sin embargo, fabricar y distribuir la vacuna para el mundo entero podría ser un problema. Como se explica en este artículo del New York Times, “las vacunas generalmente requieren grandes contenedores en los que se combinan sus ingredientes, y éstos deben mantenerse en condiciones estériles. Además, ninguna fábrica ha producido millones de dosis de vacunas aprobadas hechas con la tecnología innovadora que están probando compañías como Inovio y Moderna”.

Los fabricantes sí tienen experiencia significativa con “la producción en masa de vacunas inactivas, hechas con virus muertos, por lo que este tipo puede ser el más fácil de producir en grandes cantidades”. Pero muchos expertos ya han advertido que habrá necesidad de más de un tipo de vacuna, porque “si eso sucediera, la compañía que la desarrolle no podrá satisfacer la demanda mundial”.

Además, no olvidemos todos los elementos complementarios necesarios para una campaña de vacunación masiva. En palabras del doctor Amesh Adalja, médico especialista en enfermedades infecciosas y académico del Center for Health Security de la Universidad Johns Hopkins, “son las pequeñas cosas como las jeringuillas, las agujas, los envases de vidrio. Todo eso tiene que pensarse. No quieres algo que parezca tan simple se convierta en una demora en el programa de vacunación”.

Finalmente, está el tema de la asequibilidad. Todavía no existe una vacuna, pero ya hay preguntas sobre quién podrá pagarla. La Unión Europea sugirió crear un grupo voluntario de patentes para ejercer presión sobre las empresas para que renuncien a las ganancias monopolísticas de las vacunas que desarrollen. Otros líderes mundiales han pedido que la vacuna sea declarada un bien público. Lo cual sería justo dada la gran cantidad de dinero público que actualmente financia la investigación y las pruebas para esta vacuna. Al final, sin embargo, la razón más convincente es que “no estamos a salvo hasta que todos estén a salvo”, en palabras de Helen Clark, ex primer ministro de Nueva Zelanda.

5) Algunos senadores republicanos empiezan a sentir la presión

Con las elecciones a menos de seis meses, algunos senadores republicanos están empezando a tener dudas sobre la “pausa” que ha declarado el senador Mitch McConnell ante cualquier nueva legislación que brinde asistencia económica adicional en relación con la crisis de COVID-19. Según The Hill, “un creciente grupo de senadores republicanos, que incluye a algunos de los miembros más vulnerables de la conferencia en las elecciones de este año, dicen que no deberían dejar pasar otro mes sin un progreso significativo en otro paquete de ayuda económica”.

Entre los que han expresado su apoyo a la aprobación de la legislación lo más rápido posible se encuentran la senadora Susan Collins (R-Maine), quien “tomó la palabra el miércoles para instar a sus colegas a que no esperen más para aprobar otro paquete de ayuda con cientos de miles de millones de dólares en ayuda adicional para los gobiernos estatales y locales” y el senador Cory Gardner (R-Colorado), quien “instó al Senado a no salir de la ciudad durante el receso de una semana del Día de los Caídos (Memorial Day) después de hacer poco o ningún progreso en otro proyecto de ley de alivio para el coronavirus”.

No sabemos si estos senadores están dispuestos a romper filas con el senador McConnell, quien se conoce por dirigir el Senado con mano dura. Pero la presión de la reelección, combinada con cierta protección política provista por Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal, que esta a favor de que el Congreso gaste más en alivios, podría ser suficiente para empujar a estos senadores a llegar a un acuerdo con los demócratas. Los mantendremos informados a medida que se desarrollen los eventos.

Cita del día

For the most part [town officials] were men with well-defined and sound ideas on everything concerning exports, banking, the fruit or wine trade; men of proved ability in handling problems relating to insurance, the interpretation of ill-drawn contracts, and the like; of high qualifications and evident good intentions. That, in fact, was what struck one the most — the excellence of their intentions. But as regards the plague, their competence was practically nil.

—Albert Camus, The Plague

Hasta aquí nuestro compendio diario.
¡Manténganse seguros y bien informados!