Weekly Review – 25 junio 2020

Publicado el 25 de junio de 2020 / Read in English

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Estimados lectores:

Esta semana nos enfocamos en dos asuntos importantes para Puerto Rico. Primero, analizamos los recientes fallos judiciales que sostienen que el Congreso no puede discriminar en contra de los residentes de Puerto Rico y Guam en la aplicación del programa de Seguro de Ingreso Suplementario.

En segundo lugar, destacamos algunas de las dificultades inherentes al rastreo de casos y contactos. Estos procesos parecen engañosamente simples a primera vista, pero requieren una inversión significativa de tiempo, dinero y recursos humanos. Estos problemas se vuelven aún más importantes a medida que las líneas aéreas aumentan sus vuelos a Puerto Rico, especialmente desde los Estados Unidos, donde más de veinte estados están experimentando un aumento significativo en los casos de COVID-19. Esta entrada de personas puede causar un brote generalizado de COVID-19 en Puerto Rico, con graves consecuencias económicas y para la salud. De ahí la importancia de implementar un sistema robusto para rastrear casos y contactos en la isla.

Sergio M. Marxuach, editor

Análisis de CNE

Impacto del programa de Seguro de Ingreso Suplementario en Puerto Rico

Por Rosanna Torres

En el video a continuación, Rosanna Torres explica el programa SSI y por qué debería incluir a la población elegible en Puerto Rico.

El Seguro de Ingreso Suplementario (conocido por sus siglas en inglés como el SSI) es un programa federal que brinda asistencia monetaria a personas mayores de 65 años y a personas ciegas o discapacitadas que enfrentan dificultades extremas para cubrir sus gastos básicos de vida. Aunque el programa opera en los 50 estados, el Distrito de Columbia y el Estado Libre Asociado de las Islas Marianas del Norte, el programa no está disponible para los residentes de Puerto Rico, Guam o las Islas Vírgenes de Estados Unidos. En cambio, estos territorios participan en el programa de Asistencia Monetaria para Personas de Edad Avanzada, con Ceguera o Discapacidades (AABD, por sus siglas en inglés), un programa muy inferior que se reformó en la década de 1970 para crear el SSI y mejorar la asistencia brindada a esta población necesitada.

Dos fallos judiciales recientes han determinado que esta exclusión categórica de los residentes de Puerto Rico y Guam es inconstitucional. En nuestro análisis de esta semana, nuestra oficina de Washington D.C. analiza más de cerca el impacto que el programa SSI podría tener para los residentes de Puerto Rico y los posibles beneficios económicos asociados con éste.

La importancia de seguirle el rastro al coronavirus

Por Deepak Lamba Nieves, Ph.D.

El rastreo de casos es una de las herramientas más importantes que se han inventado los profesionales de la salud, pues sirve para romper las cadenas de contagio de numerosas enfermedades. A grandes rasgos, es un proceso que busca identificar, evaluar y apoyar a personas que han estado expuestas a una enfermedad, para evitar que se siga propagando. Ha sido clave en la lucha contra numerosos virus, desde el VIH y el ébola, hasta el coronavirus de nuestros días que sigue propagándose a galope en muchas partes del mundo. Lejos de ser un ejercicio sencillo, el rastreo efectivo de casos requiere una combinación de recursos—humanos, financieros y de coordinación, entre otros—que varía según el lugar y las dinámicas socioeconómicas. Esta historia publicada por el New Yorker reseña los esfuerzos del “Community Tracing Collaborative” del estado de Massachusetts y revela detalles clave sobre la complejidad del programa y los retos que enfrentan, aun cuando cuentan con el dinero y las personas capacitadas para la encomienda.

En Puerto Rico, contamos con varios programas municipales de rastreo de casos que se han inspirado en un modelo que creó el Municipio de Villalba. Aunque muchos de los programas apenas arrancan, en CNE nos interesa estudiar a fondo estos nuevos servicios municipales que prácticamente se arman desde cero y con escasos recursos. Actualmente, estamos preparando un estudio de caso sobre el programa de rastreo de casos de Villalba, en alianza con Ciencia Puerto Rico, y esperamos seguir expandiendo nuestro análisis hacia otros ayuntamientos. Más que traerles una buena historia sobre la inventiva municipal, nos interesa identificar prácticas y políticas exitosas que sirvan para mejorar nuestra infraestructura de salud pública. Pendientes.

Por si no lo han visto

Incertidumbre significativa. Esa fue la frase que utilizó Jerome Powell, presidente de la Junta de Gobernadores del Sistema de la Reserva Federal, para describir la recuperación de la economía de Estados Unidos en su testimonio ante el Comité de Banca, Vivienda y Asuntos Urbanos del Senado de Estados Unidos.

Esa incertidumbre surge principalmente de la crisis de salud causada por el virus SARS-CoV-2. La velocidad con que se ha esparcido ese virus, que causa el COVID-19, a través de todo el mundo ha sido asombrosa, afectando a más de ocho millones de personas en 188 países o territorios, causando la muerte de más de 400,000 seres humanos. Los esfuerzos para mitigar los estragos de la pandemia, a su vez, han causado el colapso más profundo en la actividad económica desde 1945. De acuerdo con datos del Banco Mundial, la recesión actual es la cuarta más aguda desde 1871, superada solo por la caída en la actividad económica durante las dos grandes guerras del siglo 20 y la Gran Depresión, y sus analistas estiman que casi el 90% de todos los países se encuentran en recesión, la fracción más alta en 150 años.

La primera fase de ReImagina se completó con éxito

La primera fase del proyecto ReImagina Puerto Rico, que comenzó sus esfuerzos de planificación en 2017, concluyó con éxito este mes. En su fase inicial, ReImagina convocó y participó en 77 diálogos con 748 participantes, y desarrolló 97 recomendaciones específicas, 6 informes sectoriales y un informe general para reconstruir un Puerto Rico más fuerte, más justo y más próspero. El Informe ReImagina Puerto Rico se utilizó como referencia tanto en el Plan de Recuperación Económica y de Desastres del Gobierno de Puerto Rico (el “Plan de Recuperación”) como en el Plan de Acción de Recuperación de Desastres del Departamento de Vivienda de Puerto Rico para los fondos CDBG-DR. Más del 66% de las 276 acciones específicas que se incluyeron en el Plan de Recuperación se basaron en las recomendaciones de ReImagina.

En 2019, ReImagina se convirtió en un programa permanente del Centro para una Nueva Economía y desde entonces se esforzó por implementar algunas de las recomendaciones incluidas en sus informes. En colaboración con organizaciones sin fines de lucro locales e internacionales, ReImagina desarrolló varias herramientas de recuperación, como la Guía para el diseño de centros comunitarios resilientes en comunidades isleñas, la Guía para aumentar la resiliencia de los hogares en contra de los huracanes y un directorio digital de recursos de la industria de la construcción en Puerto Rico (construccionpr.org). ReImagina ofreció seminarios sobre manejo de aguas de escorrentías y desarrolló una herramienta que identifica las fuentes de financiamiento disponibles para estos proyectos. ReImagina también finalizó el desarrollo de su base de datos pública en línea que mapea proyectos de reconstrucción y recuperación en Puerto Rico, en particular los liderados por ONGs y entidades privadas.

El ambiente difícil para recaudar fondos que ha existido en Puerto Rico durante los últimos años, así como los desafíos de ser un programa independiente que no acepta fondos del gobierno, en última instancia, limitaron la capacidad de ReImagina para ejecutar completamente la segunda fase del proyecto.

La segunda etapa de ReImagina, que consiste en completar la ejecución del programa, se pondrá en pausa hasta que se identifiquen los fondos para poder emprender el proyecto.

En nuestro radar...

Los sectores dominados por mujeres sufren pérdidas de trabajo desproporcionadas durante la pandemia – un reportaje de Sarah Chaney para el Wall Street Journal muestra que “las mujeres trabajadoras representan la mayoría de las personas empleadas en el sector de servicios, incluidos el servicio de alimentos y el cuidado personal, que son más vulnerables a las medidas de distanciamiento y han sufrido la peor parte de las pérdidas durante la actual crisis económica. Las mujeres casadas, que en recesiones pasadas aceptaron trabajos para compensar la pérdida de ingresos cuando su esposo o pareja fue despedida, son menos probable que busquen trabajo porque sus oportunidades de empleo ahora también son limitadas … ”

Muertes por desesperación y la pandemia – Los profesores de Princeton, Anne Case y Angus Deaton, sostienen que “Estados Unidos se encuentra en medio de dos epidemias, cada una de las cuales ha expuesto profundas desigualdades entre razas y niveles educativos. Entre el aumento de ‘muertes por desesperación’ entre los blancos de la clase trabajadora y las tasas más altas de mortalidad por COVID-19 entre los afroamericanos, continuará la asombrosa disminución secular en la expectativa de vida de Estados Unidos”.

¿De qué se preocupan los economistas? – Según Annie Lowrey, que escribe para The Atlantic, “la gente todavía está asustada. Los estadounidenses siguen muriendo. Pero la próxima fase incómoda de la pandemia de coronavirus está aquí. Y parece probable que el punto más bajo de la crisis financiera, el punto en el que la economía deja de colapsar y comienza a crecer nuevamente, ha pasado”. Sin embargo, “al menos cuatro factores principales están asustando a los economistas y pesan sobre la recuperación: el precipicio fiscal de los hogares, la gran desaparición de negocios, los déficits de los presupuestos estatales y locales, y la persistente crisis de salud”.